Trabajando en el impacto positivo, sin caer en el AI washing.
Pensar sólo en sus riesgos, nos hará perder de vista que la IA es un arma cargada de futuro.
Destrucción del empleo, sesgos perjudiciales de los algoritmos o el final de la humanidad si se nos escapa la IA de las manos. La cobertura mediática explota un sesgo bien conocido, el efecto de la negatividad: le prestamps más atención a eventos negativos frente a aquellos neutros o positivos. Pinchamos más en una noticia inventada sobre un dron militar cuya IA intentó matar a su operador que en un análisis complejo de cómo AlphaFold de Google Deepmind predice la estructura tridimensional de las proteínas.
En la histórica batalla entre optimismo y pesimismo, los optimistas racionales jugamos un papelón hoy en día. Explicar que al igual que la ciencia y la tecnología han ayudado a duplicar la esperanza de vida, a combatir el hambre o a vencer la pobreza extrema, la IA bien usada puede crear un mundo mejor. De hecho, ya lo hace.
En un escenario como ese, las empresas no pueden limitarse a reducir costes. Deben dar un paso más y usar la IA para generar un impacto positivo en la sociedad y en el planeta.
Lo que no se ve, pero se verá.
Todos los lectores de esta newsletter habrán participado en algún momento en una discusión sobre el uso de ChatGPT en los colegios. Parece que “prohibirlo” ya no es la única opción aunque así era en sus comienzos. En esa tesitura, le suelo recordar a mis contertulios que muchos niños en el mundo no tienen fácil acceso a la educación ni a buenos profesores, algo que puede parecer más común en sociedades avanzadas. La primera vez que escuché a Sal Khan, fundador de Khan Academy hablar sobre el rol de GPT en la educación, me explotó la mente. Este año, 8.000 profesores testearán su chatbot escolar Khanmigo.
La semana pasada hablaba de Ello, un chatbot que ayuda a los niños a abrazar la lectura y ayudar en la alfabetización infantil. Por un lado, los LLMs pueden convertirse en grandes aliados para proporcionar oportunidades de acceso a la educación superior y al progreso económico individual en todo el mundo. Pero existe un aspecto más sutil si cabe.
¿Crees adecuado que en entrevistas para puestos de trabajo en los que la función estética no es necesaria, el aspecto físico del candidato condicione el proceso? La respuesta parece obvia. ¿Y si hablamos del “candidato más listo”? Medir la inteligencia no es tarea fácil, y además ya hay consenso sobre la existencia de varios tipos de inteligencia. Muchas de estas inteligencias vienen de serie, condicionadas por nuestros genes. Y ser listo por genes tiene escaso mérito. La IA que pinta, que canta, que escribe, puede convertirse en un gran nivelador social. Si parece obvio que debemos ayudar a personas con capacidades intelectuales o psicomotrices limitadas, ¿por qué limitarnos a aquellos con limitaciones más severas? Si yo soy mediocre en el análisis numérico, ¿por qué no debería ayudarme de herramientas que me ayuden a superar esa barrera? Si me cuesta pintar, ¿no sería fantástico que una herramienta me ayude a expresarme visualmente? La IA como ampliadora de la inteligencia y la creatividad humana parece una magnífica causa por la que luchar.
IA y progreso científico: una revolución en ciernes.
Hace unos días, The Economist analizaba si esta nueva ola de IA podría tener un superimpacto en el progreso científico y generar una ola de descubrimientos, similar a lo que inventos como el microscopio y el telescopio consiguieron para la astronomía o la medicina.
Las herramientas y técnicas de IA se aplican hoy en casi todos los campos de la ciencia [...] Puede identificar candidatos prometedores para el análisis, como moléculas con propiedades particulares en el descubrimiento de fármacos, o materiales con las características necesarias en baterías o células solares. Puede examinar montones de datos, como los producidos por los colisionadores de partículas o los telescopios robóticos, en busca de patrones. Y la IA puede modelar y analizar sistemas aún más complejos, como el plegado de proteínas o la formación de galaxias. Las herramientas de IA se han utilizado, entre otras cosas, para identificar nuevos antibióticos, descubrir el bosón de Higgs o detectar acentos regionales en los lobos.
El uso de la IA para combatir el cambio climático, prevenir enfermedades, desarrollar fármacos, entender el lenguaje de los animales… es apasionante. Pero cuando las empresas colaboren en este tipo de gestas se enfrentarán a acusaciones de AI washing. Por eso debemos ser precavidos en la comunicación y sobre todo, debemos recordar que la mejor responsabilidad social de toda empresa no debería limitarse a dar apoyo lateral a grandes causas humanitarias sino que debería centrarse sobre todo en su día a día. En cómo usar la IA para mejorar y lanzar nuevos productos y servicios que nos hagan progresar.
La IA nos ayuda a crear productos y servicios relevantes para la sociedad.
Al hablar de impacto positivo empresarial es habitual fijarse en los 17 objetivos de desarrollo sostenible fijados por la ONU. Pero incluso si nos enfocáramos sólo en el 8, 9 y 12, esta lista nos hace perder de vista el que debería ser el principal objetivo de una empresa: generar riqueza a largo plazo (para accionistas y la sociedad en general) creando productos y servicios relevantes para el mercado y para la sociedad, con una experiencia de uso óptima. En Good Rebels, usamos el concepto “Human-Centred Organisations” o HCOs (leer más) para referirnos a este tipo de compañías con o sin ánimo de lucro.
La Inteligencia Artificial es una poderosa herramienta que ayuda a crear mejores productos y servicios y a mejorar la experiencia de uso de los mismos:
Investigación de mercado y análisis numérico accesible. Desde una simple conversación con ChatGPT hasta el uso de herramientas de escucha digital, pasando por el análisis predictivo que ponga en valor datos enterrados en silos organizacionales.
Mejora de la experiencia de usuario. Muchos productos y servicios se lanzan sin apenas testing, pero la IA abarata los costes y ayuda a captar datos en puntos de contacto y a optimizar así la experiencia. No hay excusa.
Comunicación y ventas más efectiva. Ser una HCO conlleva una gran responsabilidad: conseguir llegar al mercado. Si te crees en posesión de un producto o servicio beneficioso para la sociedad, vender es un acto de altruismo.
Operaciones más fluidas. La IA lleva años abaratando los costes de producción. Algo necesario siempre y cuando se haga de manera responsable y fomentando un consumo coherente.
El futuro lo construyen las personas, con herramientas. Y no ha ido tan mal hasta ahora.
Los tres primeros puntos del epígrafe anterior son el objeto expreso de Rebel Intel. Pero no sirve de nada escribir y hablar sobre la IA en el ámbito del marketing, la comunicación o la experiencia de cliente, si nos quedamos en la superficie de los aspectos negativos de la IA, y creamos desconfianza a nuestro alrededor. Sin ingenuidad, sin pintar todo de color de rosa. El tecno-optimismo racional no es complaciente. Existen múltiples retos para aplicar la IA sin perjuicio social. Ya está encima de la mesa el debate regulatorio y existe una polémica abierta sobre IAs centralizadas o de código abierto. El primer enfoque simplifica el control pero perjudica la innovación, y beneficia sobre todo a los grandes jugadores de la industria. La segunda aproximación ayuda a construir sobre hombros de gigantes, mediante la colaboración y la inteligencia colectiva. Meta es su defensor más visible (estos 5’ de Yann LeCun en el Congreso americano esta semana, no tienen desperdicio), pero se cuentan por miles las voces de emprendedores e investigadores que apoyan este enfoque. Con el uso ético como condición sine qua non, por supuesto.
Como ha ocurrido con tantos avances tecnológicos, los aspectos negativos parecen eclipsar a los positivos, pero el paso del tiempo demuestra lo contrario. La escritura amenazaba acabar con la memoria, la imprenta llevaría al caos y el descontrol, pero desencadenó una revolución cultural y científica de la que se beneficia nuestras generaciones. Lo que nos gusta, conlleva también inconvenientes. Las redes sociales y los móviles conectados pueden perjudicar nuestra salud mental, pero también nos conectan con nuestros seres queridos.
No olvidemos que los algoritmos que generan adicción han sido programados por humanos. Convenzamos pues a los humanos, de programar algoritmos para evitar las adicciones. El problema nunca son las herramientas, sino los incentivos. Mejoremos la democracia y nuestro sistema capitalista, de forma que se establezcan incentivos para la creación de riqueza compartida por toda la sociedad a largo plazo. En ese contexto, la IA será siempre un arma cargada de futuro.
El próximo domingo, vuelvo a tu buzón.
Fernando.
Anunciamos hace unas semanas la creación del Foro IA en MXC (Marketing, Experiencia de cliente y Comunicación). Impulsado desde Good Rebels y fundado por un increíble grupo de 20 ejecutivos MXC de grandes empresas y startups para fomentar el aprendizaje y el uso de herramientas IA en la profesión. Puedes leer más sobre la iniciativa y alguno de los profesionales que componen el grupo de fundadores aquí.
Enlaces de interés para el profesional MXC.
Una selección de artículos y enlaces que me han parecido relevantes en la última semana:
¿Cómo están usando los periodistas la IA generativa? Nueva edición del informe de Journalism AI con el apoyo de Google. Alrededor del 85% de los encuestados -entre periodistas, tecnólogos y directivos de empresas de medios- han experimentado al menos con la IA generativa para ayudar en tareas como la escritura de código, la generación de imágenes y la redacción de resúmenes.
Algunos encuestados señalaron que la IA puede ayudar a liberar capacidad para realizar un trabajo más creativo al ayudar en tareas que requieren mucho tiempo, como la transcripción de entrevistas y la comprobación de hechos. JOURNALISM AI, GOOGLE
Relacionado, una reflexión interesante sobre el puesto de trabajo que publicó el NYT buscando un responsable de IA generativa. El principal uso de estos modelos en las redacciones no debería ser escribir artículos, y se encuentra más bien se encuentra en los laterales del proceso periodístico. AXIOS
Copilot, la aclamada herramienta de Microsoft llega a Windows con carácter general. Son grandes noticias. Google también está en ello. MICROSOFT
La semana pasada le tocó a A16Z y esta a Sequoia. Una magnífica recapitulación de un año de IA generativa y cómo avanzar a partir de ahora. Sostienen que estamos entrando en el "Acto 2", en el que las empresas deben enfocarse en resolver los problemas reales de usuarios y clientes, no limitarse a mostrar deslumbrantes demostraciones tecnológicas. SEQUOIA
Como quien no quiere la cosa, las grandes plataformas van introduciendo funcionalidades de IA generativa para los creadores de contenido. Esta semana, TikTok anuncia nuevas herramientas y el etiquetado automático para prevenir al usuario de que un contenido ha sido creado enteramente con IA. Y YouTube ha anunciado Dream Screen para generar backgrounds de vídeos y una nueva herramienta para inspirar contenido a los creadores. TECHCRUNCH, YOUTUBE
ElevenLabs una de las startups más aclamadas en “text-to-speech” lanza un nuevo proyecto para producir audiolibros. ELEVENLABS
¿Pueden las IAs generativas crear arte original o son meros copycats? Un usuario de Reddit revolucionó las redes estos días, publicando una imagen fascinante. La creo con Stable Diffusion y una técnica de guiado llamado ControlNet. La combinación de IA generativas y simbólicas es el futuro. ARS TECHNICA
“En 18 tareas diferentes seleccionadas como muestras realistas de los tipos de trabajo realizados en una empresa de consultoría de élite, los consultores que utilizaron ChatGPT-4 superaron ampliamente a los que no lo hicieron. En todas las dimensiones. En todas las formas de medir el rendimiento.” Un importante paper sobre los efectos de la IA en la productividad y la calidad de los trabajadores trabajo del conocimiento. LINK
Aprendí hace años sobre redes neuronales convolucionales en Coursera de la mano de Andrew Ng. Siempre me fascina su capacidad para explicar de manera "sencilla" algo tan complejo. Esta conferencia de julio en Stanford combina una revisión fundacional de conceptos de IA, pero también ofrece una concisa visión de lo que su título indica: oportunidades en IA. Startups, riesgos, hype... STANFORD ONLINE
La mayor parte de los usuarios de IA generativa en Reino Unido son usuarios infrecuentes. “De los que han utilizado la IAG, uno de cada diez (9%) lo hace a diario, y tres de cada diez (28%), semanalmente. De la población adulta, serían el 2% y el 7% respectivamente. Es probable que estas personas hayan encontrado una utilidad tangible que les hace más productivos”. DELOITTE
Una demo de la Alexa que viene. Los esfuerzos de Amazon para relanzar su asistente de voz con IA generativa. CNN
En esto de la adopción suelo poner de ejemplo el caso del ascensor:
Si partimos del ascensor de Elisha Otis que ya contaba con el sistema de seguridad en caso de rotura del cable, hay que decir que se presentó en 1854, pero el primer edificio en instalar uno fue en 1874, es decir 20 años después. Y hasta otros 30 años más tarde no se empezó a usar de manera común.
La razón principal el miedo, y lo puedo entender poniendo en la piel de aquellas personas, pero hoy nos subimos en un ascensor confiando en su tecnología y medidas de seguridad.
Ahora nos cuesta subirnos a la IA, pero un día lo veremos habitual, conviviremos con ella, y pasará casi desapercibida en nuestro día a día. Y seguro que no serán necesarios 50 años 👍
Solo con la primera frase, todavía no lo he terminado de leer, ya tienes mi ❤️